El Museo del Prado apuesta por nuevas lecturas de su propia colección con el objetivo de compartirlas con toda la sociedad más allá de sus muros.
Más 11.000 m2 de PVC microperforado cubren las fachadas del edificio Villanueva con detalles de las telas del Prado, con los tejidos que han representado los maestros de la pintura, las “telas” del Prado, pero telas “pintadas” en las que se ven los golpes de pincel, los movimientos y la pintura, los craquelados y cambios que provoca el tiempo. Una nueva mirada al interior de la colección en la que se han buscado calidades, gamas cromáticas, materias y gestualidades que se potencian entre sí y que visualmente se integran en la arquitectura.
Para este proyecto único se han seleccionado un total de once detalles de nueve obras, que cubren las fachadas con quince lonas: La disputa con los doctores en el Templo de Veronés, La Coronación de la Virgen de Velázquez y La Trinidad del Greco decoran la fachada oeste (puerta de Velázquez), La Virgen con el Niño entre San Mateo y un ángel de Andrea del Sarto, Magdalena penitente de Ribera y La siesta de Alma Tadema visten la fachada este, y Cristo abrazando a San Bernardo de Ribalta engalana la fachada sur (puerta de Murillo). La fachada norte (puerta de Goya) se descubrió al público el pasado 19 de noviembre durante un simbólico acto de presentación.
